Llevo tiempo sin saber lo que es tener novio, un compañero fiel, una personita que este a mi lado ayudándome y protegiéndome. El último fue hace unos 6 años, cuando recién empecé a estudiar enfermería en la Universidad, pero como los estudios son tan caros acá en Chile, pues para poder sostenerme y juntar dinerito para pagar mis estudios pues decidí meterme a escort. Y no me arrepiento, porque lo disfruto mucho y además de ser una pega lucrativa, que me ha dado mucho económicamente, tanto para ahorrar y comprarme una casita como para pagarme mis estudios universitarios
Les cuento que poco antes de la pandemia, tuve un cliente muy misterioso, que estaba cortejándome, fastidiándome mucho en mis redes sociales, me mandaba frecuentemente mensajitos, poemas de amor, frases lindas, y textos ,muy eróticos algunos, hasta cochinos, pasados de tono a mi Whatsapp.
Pero lo que no me gustaba era que no podría ver ni su identidad ni su foto. Pensé era un perfil falso, de un viejo pajero, de esos acosadores sexuales que uno encuentra por ahi, pero con el tiempo me di cuenta que era mi primer pololo que yo tuve en la Universidad, poco antes de meterme a puta.
Se llama Carlos y con el hacíamos el amor divinamente, además era super romántico, cariñoso, atento y educado conmigo. Lo amaba, pero él era para esa época muy celoso y no podía aceptar que me metiera a escort. Gracias a Dios la forma de pensar de mi ex pololo ha cambiado, es mucho más abierto y comprensivo. Carlitos es más “Open Mind” ahora y luego de meses de conversar mucho por whatsapp con él, decidimos volver a re encontrarnos y ver si reiniciábamos nuestro rico romance y volver a ser pololos de nuevo.
Y llegó el día esperado de ese re encuentro, de tanto oírlo, (ahora Carlos se había convertido en un reconocido locutor y profesional de la radio), con esa voz sexi, grave, ronca, me hacía suspirar y poner mi imaginación a viajar con mis atrevidas fantasías sexuales.
Tengo varias noches imaginándolo en mi cama haciéndome salvajemente el amor con sólo oírlo, como locutor en la radio, y entonces poco a poco mis manos y deditos van recorriendo mis partes íntimas, poco a poco, por fuera y por dentro, cada centímetro de mi excitante piel.
Recuerdo que fue un día viernes en la tarde nuestro emocionante re encuentro
Yo estaba notablemente ansiosa, era puro nervios, sudaba, vestía una mini falda, y una blusa escotada que hacía ver mis grandes senos más provocativos y sexis. Me había puesto aceites calienticos en el cuerpo y olía divino. Era una bomba sexi explosiva para mi pololo
Carlitos llegó vestido con pantalones casuales y una polera deportiva muy sexi, olía muy bien, estaba perfumado y se veía también impaciente. Lo vi (y casi lo desnude) de arriba abajo con mi mirada, él también me comió con su libidinosa mirada.
Entonces nos saludamos muy alegremente y nos dimos un largo y apasionante beso mojado, en el cual nuestras calientes lenguas no se despegaron por un par de minutos
Simultáneamente sus manos comenzaron a recorrer todo mi cuerpo, mientras me desvestía poco a poco Yo le abrí mis piernas emocionada, para que sus dedos escarbaran con lujuria, en medio de mis jugosos muslos y entrepiernas, mientras nuestros labios continuaban su juego amatorio. Yo igualmente fui desvistiéndolo y quitándole cada pieza de su ropa íntima hasta descubrir el rico y enorme bulto de su pito bajo su bóxer. Luego el paso a practicarme un largo y riquísimo sexo oral que me dejo extenuada de tanto gritar de placer. Yo en retribución le di unas largas mamadas a su largo y rojo pene hasta llevarlo igual al orgasmo
Este fue el inicio de unos largos encuentros sexuales bien hot con mi pololo, en el verano pasado de chile, el cual fue por tal motivo el más caliente de todos.
AKILES
